Los que no somos padres, ¿cuantas veces nos hemos preguntado como sería la sensación de tener esa bonita experiencia?. Lo cierto es que hablando con muchas personas que pasan por el estudio, llegas a la conclusión de que en  la vida hay muchas ocasiones que la engrandecen y la llenan de vitalidad, el traer a un hijo al mundo educarlo, y sacarlo adelante encaminándolo en lo que será un futuro prometedor, es digno de mi más profunda admiración, pienso que esta experiencia es una de las cosas que más pueden enorgullecer a una persona.

Hoy nos visitó en el estudio Jose Antonio, un amigo de la localidad Alicantina de Elche, el cual recorrió esa distancia que le separa del estudio para inmortalizar en su espalda el retrato de su pequeño. El verdadero amor de un padre no se mide por un tatuaje, pero son estos pequeños detalles en conjunto lo que hacen que día a día se mantenga ese amor. Ya que de todas las formas de amor que existen impera una sola y es la suma de todas ellas. Dani Brazal.

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